Es sabido que Libra y su regente Venus están vinculados entre otras cosas con la belleza y la apariencia física. Pero ¿de qué hablamos cuando hablamos de belleza? ¿Cómo enmarcamos a esta en un contexto que oprime nuestros cuerpos? ¿Cuánta carga mental nos produce el hecho de que la belleza física pareciera haberse impuesto como condición de existencia? Preguntas que se nos activan a la hora de pensar la temática libriana.
Más aún atendiendo a muchas mujeres y viviendo en Argentina, país que lidera las regiones del mundo en donde más se hacen cirugías o intervenciones estéticas y en donde más hay problemáticas de trastornos alimenticios. Las quotes son del librazo de @mujeresquenofuerontapa llamado la estafa de la feminidad, en donde explaya y desarrolla mucho toda esta temática.
"La belleza, mediante rituales, hábitos, fantasías y consumos, constituye el dispositivo principal y más eficiente para educarnos en la docilidad y construir la alienación.’’
"Naomi Wolf en el mito de la belleza identifica en el mandato de la belleza un dispositivo político complejo para someter, disciplinar y anestesiar a las mujeres en respuesta a los rápidos avances en la conquista de derechos, en el acceso a la educación y en la forma en la que disputaban y se esforzaban por acceder al poder.’’
"A través de la búsqueda de la belleza física como pedagogía, somos convencidas de que nuestro valor como seres humanos es la apariencia externa de nuestros cuerpos, es decir, el ser agradables a la vista. Poco importa nuestra inteligencia, creatividad o talento.’’
"La belleza como pedagogía de la humillación, del dolor, de normalización de la violencia es instalada en nosotras y produce nuestras identidades desde que somos muy pequeñas, casi desde antes de que tengamos registro de que está sucediendo.’’
"La belleza como dispositivo de normalización de la crueldad, conversa muy bien con este presente en el que la crueldad es aceptada, sin que nos parezca masivamente repudiable a la generalidad de la población’’
"La mayor efectividad y eficiencia del mandato de belleza como dispositivo de control de los cuerpos y vidas de las mujeres es que no se lo detecta como dispositivo político."
Lala Pasquinelli en la Estafa de la feminidad
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